Cada día está dividido en dos momentos: un momento de clases y triduos y otro con más tiempo de convivencia, deporte y paseos. Se invita personas del Regnum Christi a darles charlas, así como a papás y jóvenes universitarios para que cada candidato logre entender qué es lo que Dios le pide a cada uno, qué los hace más felices y así con mucha naturalidad abrirse a la posibilidad de ser sacerdotes.
Durante el candidatado se imparten pláticas, conferencias, elementos de psicología, de oración, de discernimiento; para que en un clima de mucha libertad, los jóvenes candidatos traten de examinar su corazón y de entender qué es lo que sigue para ellos, si es un camino de discernimiento que continúa en el noviciado o el inicio de una vida profesional, participar en Misión Universitaria o dar un año como colaboradores.
El P. Francisco Aguilar Barrón, L.C., es el director del candidatado este verano y explica que este tiempo es una prueba final para todos aquellos jóvenes que han estado en un proceso de acompañamiento vocacional para saber si Dios les pide ingresar al noviciado.
Los participantes provienen tanto de secciones del Regnum Christi como de Centros Vocacionales y civiles.
“A veces nos preocupamos por una crisis vocacional, pero veamos también el milagro de Dios que sigue llamando jóvenes, jóvenes normales con mil posibilidades en el mundo, a seguirlo en un camino sacerdotal. Este candidatado es prueba de eso”.
Francisco Aguilar, L.C.
Ángel Soto, candidato proveniente del Centro Vocacional de la Ciudad de México es originario de Pachuca e ingresó a la Apostólica desde primero de secundaria, lugar donde se ha formado de manera integral como una herramienta para seguir a Cristo y compartirlo a los demás.
“La Apostólica es el lugar donde caminas de la mano de Dios y disciernes tu vocación sin dejar de ser un adolescente normal, acompañado de tus formadores y recibiendo las herramientas necesarias para vivir mejor el candidatado”.
Ángel Soto.
Jaime Burguete es procedente de Granada, España e inició su discernimiento vocacional en un intercambio estudiantil que realizó en Estados Unidos donde se reencontró con la Legión de Cristo.
“Mi proceso ha sido más que un discernimiento, una entrega de miedos y de ver cómo el Señor los ha transformado en gracias. Ha sido una entrega en plena libertad y en plena paz para descubrir quién soy y lo que Él quiere de mí”.
Jaime Burguete.
Jerónimo Domenzain es de la Ciudad de México y en varias ocasiones sintió el llamado de Dios a seguirlo pero siempre le dio la vuelta a la página hasta que en la misa de clausura de la Megamisión 2024 durante la consagración, escuchó claramente cómo Jesús lo invitaba a seguirlo.
“Por algún tiempo viví en esa dualidad de seguir con mi vida normal pero al mismo tiempo con el anhelo en mi corazón de buscar el sacerdocio, por lo cual decidí iniciar mi discernimiento vocacional a través de Misión Universitaria y por fin hoy estoy aquí en el candidatado, pasando las semanas más felices de mi vida”.
Jerónimo Domenzain.
Juan Carlos Rodríguez Ávila proviene del Centro Vocacional de León a donde ingresó en tercero de secundaria para llevar su discernimiento vocacional.
“La Apostólica me pudo brindar muchas herramientas para mi discernimiento, tanto en el ámbito académico como espiritual y ahora en el candidatado estoy muy abierto a escuchar la voz de Dios para saber qué es lo que me pide”.
Juan Carlos Rodríguez.
Osiel Medina Berlanga es originario de Saltillo y estuvo en el Centro Vocacional de Monterrey.
“Fueron seis años maravillosos en la Apostólica en los que el Señor me habló y pude discernir más mi vocación mientras me formaba de manera integral dando un impulso total a mi vida, recibiendo las herramientas necesarias para ver qué es lo que quiere Dios de mí y lo he confirmado en este candidatado, lo que Él quiere de mí es mi felicidad”.
Osiel Medina.
Encomendamos a estos jóvenes para que Dios los acompañe siempre en su discernimiento vocacional.