Desde las 16:00 horas, el Gran Salón del Deportivo Cumbres se llenó de risas y entusiasmo mientras cientos de mujeres se reunían, no solo para probar su suerte, sino para apoyar con generosidad las obras apostólicas de la sección.
Con cada boleto adquirido, las participantes no solo contribuían a una noble causa, sino que también disfrutaban de una tarde de convivencia fraterna, acompañada de rifas, una deliciosa merienda y la ilusión de llevarse uno de los numerosos premios donados por patrocinadores comprometidos.

El evento inició con una emotiva oración dirigida por el P. Saúl López, L.C., quien invitó a todos los presentes a dar gracias a Dios y encomendar las intenciones de la tarde. También estuvieron acompañando con su presencia el P. Vinicius Thiedy, L.C., y las consagradas Martha Alicia Obregón, Rocío Caballero y Rocío Vizcaíno, quienes compartieron momentos de cercanía y fraternidad con las asistentes.
Nada de esto hubiera sido posible sin la entrega y dedicación del comité organizador, conformado por Lily Siliceo, Claudia Rendón Flores, Yolanda Luis Castillo, Rosy Salinas, Ana Ayala y Dora Elena Luis. Su entusiasmo y compromiso se reflejaron en cada detalle, desde la organización de las mesas hasta la coordinación de premios y actividades, todo con un único objetivo: fortalecer el espíritu de familia y contribuir al crecimiento de las obras apostólicas.

Además, un grupo de jóvenes de la Prepa Anáhuac Monterrey Campus Cumbres se sumó a la jornada, brindando su apoyo en las labores logísticas. Su alegría y disposición fueron testimonio vivo del deseo de servir con el corazón.
Más allá de la emoción de las rifas y la lotería, el verdadero premio fue la oportunidad de convivir, compartir y construir lazos. Cada risa, cada aplauso y cada muestra de gratitud reflejaron el auténtico espíritu de familia que caracteriza al Regnum Christi.

Este encuentro fue una celebración de la unidad y la solidaridad, recordándonos que, cuando los corazones se unen por una causa común, los frutos son abundantes. Con la meta de recaudación alcanzada y la alegría de una tarde inolvidable, el éxito de la lotería se sintió en cada rincón del salón.
¡Enhorabuena a todos los que hicieron posible este hermoso evento! Que el espíritu de entrega y fraternidad siga iluminando el camino del Regnum Christi.