Recordando las palabras del Papa Francisco para la 54 Jornada Mundial de Oración por las vocaciones, vemos que se centró en la dimensión misionera de la llamada cristiana, asegurando que: “Quien se deja atraer por la voz de Dios y se pone en camino para seguir a Jesús, descubre enseguida, dentro de él, un deseo incontenible de llevar la Buena Noticia a los hermanos, a través de la evangelización y el servicio movido por la caridad”.

En este contexto, el H. Eric Gilhooly, L.C. nos comparte su testimonio desde su experiencia como seminarista legionario: “Cada legionario escucha la llamada de Dios en un momento misterioso de su vida.  Puede ocurrir en la adolescencia o como un joven adulto; en un instante puntual y dramático o por medio de una lenta realización dentro del corazón. Sienten deseos de hacer cosas grandes con su vida, de cambiar el mundo y no se sienten contentos de dejar morir este sueño bajo el peso del mundo real.

Cada vocación es una llamada íntima con Nuestro Señor. Cristo invita y se hace presente en la vida del joven. El joven responde con la totalidad de su vida, con un, ‘Sí, te seguiré a donde me llevas’. No es algo que se puede explicar por puro proceso racional sino que es un enamoramiento, un impulso del corazón.

La primera etapa del noviciado consiste en dos años de mucho silencio y oración.  La meta es fundamentar su vida espiritual en una relación sólida con Cristo sobre la cual edificarán durante el resto de sus vidas.  Es también tiempo de aprender, qué significa consagrar su vida a Dios dentro de la Legión de Cristo, esa familia religiosa específica.

Sólo aprendiendo a escuchar la voz de Dios en sus vidas podrán hacer un discernimiento profundo de su vocación. El noviciado termina en la profesión temporal de la pobreza, la castidad y la obediencia.

Generalmente los legionarios viven su primer año haciendo estudios humanísticos, mientras siguen profundizando en su vocación. Estos estudios preparan al joven para poder evangelizar la cultura. ¿Cuáles son los deseos más profundos del hombre, expresos en obras de arte? En el último instante, el hombre busca la belleza que es Dios mismo.

Los estudios filosóficos afrontan las cuestiones más profundas y lleva a los legionarios hasta las fronteras donde la razón les puede llevar. La mente se forma para ir a lo profundo en búsqueda de la verdad, que finalmente se funda en Dios.  El legionario también aprende a dialogar con diversas corrientes de pensamiento.

Entre la filosofía y la teología, generalmente hay un período de prácticas apostólicas de varios años, en donde los hermanos experimentan y participan en diversos apostolados del Regnum Christi y ponen a prueba sus convicciones y hábitos de vida religiosa.

La Filosofía prepara el terreno para una cooperación entre la razón y la fe que continua en la Teología. La Teología es una etapa para profundizar las verdades reveladas por Dios, estudiar la escritura, los sacramentos, etc. Sobre todo, son años de preparación para recibir la ordenación sacerdotal.

¡Y el sacerdocio es sólo el inicio de la aventura!”.

Este año gracias a Dios, el Regnum Christi tuvo los siguientes frutos vocacionales en los primeros nueve meses de este año:

• 70 nuevas colaboradoras de los territorios de México y Monterrey.
• Más de 60 religiosos legionarios que renovaron votos en el territorio de México.
• Ingreso de 13 novicios de centros civiles al noviciado de Monterrey:
  • 10 del territorio de México
  • 3  del territorio de Monterrey
• 13 novicios Legionarios de Cristo emitieron su primera profesión religiosa.
• 2 religiosos renovaron sus votos en Monterrey.
• Ingreso de 31 nuevos apostólicos al Centro Vocacional La Joya y 10 nuevos precandidatos al Centro Vocacional del Ajusco.
• 2 jóvenes en el Candidatado de los Laicos consagrados
• 58 nuevos colaboradores
• 1 consagración de un laico mexicano (emisión de votos temporales) en España
• 6 consagraciones de señoritas (emisión de votos temporales) y 2 (emisión de votos definitivos) en Monterrey
• Ordenación diaconal de 9 nueve religiosos mexicanos y 2 salvadoreños.

Una de las instancias especializadas para impulsar la formación de los Legionarios de Cristo es ProBECA que con la ayuda de bienhechores, familiares y amigos, ayudan a 11 centros vocacionales.

La misión de ProBECA es crear, atender y mantener una comunidad de bienhechores que se mantenga comprometida con la Iglesia por medio de la Legión de Cristo y se cuente con ellos de forma permanente y consistente.

Sí puedes apoyar, comunícate al 55 20 13 66

Visita su página: http://www.probeca.regnumchristi.org/