El domingo 23 de mayo, en la Solemnidad de Pentecostés, se llevó a cabo la celebración eucarística donde 20 laicos, en su mayoría matrimonios, renovaron su promesa definitiva de disponibilidad como misioneros permanentes del Regnum Christi.
En la celebración estuvieron presentes los miembros del Colegio Directivo Territorial del Regnum Christi en México y Centroamérica, Lorenza Sanromán, José Mateos y P. Alberto Simán, L.C., quien también presidió la misa junto con los padres Eduardo Robles-Gil, L.C., y Rodolfo Mayagoitia, L.C.
Durante la homilía, el padre Eduardo habló sobre la incertidumbre en la misión. Recordó que los apóstoles en Pentecostés tampoco sabían qué debían hacer exactamente, confiaron en el Espíritu Santo y recibieron sus dones. “Cristo no nos envía por caminos exactos, nos envía con incertidumbre. Lo único que sabemos como apóstoles de Cristo, como misioneros, es que vamos acompañados por la presencia de Dios, y la inspiración del Espíritu Santo”. También recalcó que se necesitan apóstoles jóvenes, matrimonios jóvenes, vocaciones consagradas y en especial pidió por los misioneros permanentes, para que su vocación se lleve a la plenitud.
Al terminar la misa, el padre Simán realizó la ceremonia de renovación de promesa en la que entregó una Cruz y un cirio a 4 matrimonios de manera presencial y con los demás misioneros permanentes, que seguían la celebración de forma virtual, lo hizo de forma simbólica a través de videoconferencia.
Posteriormente leyó el mensaje que, desde Roma, envió el P. John Connor, L.C., presidente del Colegio Directivo General del Regnum Christi en donde felicita a los misioneros: “En este día en que ustedes renuevan su compromiso de continuar con la evangelización, que es parte fundamental de la misión de la Iglesia, ante la imposibilidad de estar físicamente presente en la ceremonia, he querido al menos mandarles estas palabras de gratitud y aliento. Muchas gracias por su generosa entrega en la transmisión de la fe a la siguiente generación. Valoramos y apoyamos su compromiso en esta labor fundamental”.
Finalmente el padre Simán dedicó también unas palabras a quienes renovaron su envío: “Pidamos que el Espíritu Santo infunda, irrumpa con profundidad en su corazón y en los corazones a los que ustedes seguirán, con arduo esfuerzo, predicando el evangelio y que también el Espíritu Santo conceda al Regnum Christi el don de muchísimas familias misioneras que quieran seguir dando lo mejor de sí, predicando el Evangelio y llevando a Jesucristo con el testimonio de vida diaria.
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